Querido cabo, me destroza ver a los soldados así. Sus heridas me duelen como si fueran mías, aunque entiendo que lo pueda dudar, dado que, al fin y al cabo, he salido ileso de la batalla. Ahora veo los ejercicios de rehabilitación que deben hacer y se me estremece el alma. Daría un brazo, mi salud, lo que fuera, por poder cargar con su peso. No quiero que sean ustedes quienes carguen con esto. Veo que les puedo ayudar (con la dichosa sintaxis), darles ánimos, obligarles a tomárselo en serio; pero nada evitará que tengan que ir a los ejercicios y volver a luchar en la siguiente batalla (la tercera evaluación). Siento que en esta parte del conflicto debo mantenerme en la distancia (hasta cierto punto), y me está costando muchísimo. Tengo mil discusiones con mis superiores acerca del tema (con mi padre), trato de defenderles, de hacer que no les consideren unos incompetentes, pero... poco más. Nada está en mi mano
La carta del soldado De la T me llena de pesar e impotencia. Sé que no puedo hacer nada más, que debo confiar en el Máximo Jefe; pero me cuesta muchísimo. ¿Cómo me ha visto usted este tiempo, cabo? ¿Parece que me resulta indiferente? Me ha llenado el dolor, un dolor que se ha concretado más al leer las palabras del soldado De la T.
Pero supongo que este momento de dificultad también es parte de Su plan; sé que Él está llorando conmigo por ustedes al ver que sufren. Pero el Máximo Jefe, mucho más inteligente que yo y con una mayor clarividencia, está mucho más tranquilo también. Sabe que lo más importante no es el sufrimiento físico (las recuperaciones, en las que yo me quedo) sino que finalmente vean que no es sólo polvo. Que hay un plan y una belleza innegable en todo esto. Lo tiene todo claro como el agua, al contrario que yo (me quedo en lo inmediato, as usual).
No me deje perder la tensión por todos ustedes, cabo (si verdaderamente ellos necesitan que me meta en la biblio y no me quede en el pasillo, lo haré)
De I a T
Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón