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COLOMBIA

La mejor salsa del guiso es el hambre

Sandra Valero
12/07/2016

6:45 a.m. Suena el despertador, el día promete tornarse agitado, zapatos y ropa adecuados para un evento en la noche; en la universidad la jornada comienza con un conversatorio sobre Fe y Empresa seguido de la exhibición y degustación de los alimentos autóctonos de los llanos de Colombia.

«Hola, ¿qué tal tu viaje?». La pregunta casi obligada para Julián de la Morena que se acerca al stand comercial. Aquí le ofrecemos el mejor queso siete cueros de la región. Comienza la degustación gastronómica.
Llega la noche y Julián inicia su intervención, observando antes la belleza del lugar, hermosas hortensias, rosas y lirios blancos sobre un mantel color azul turquesa que combinaba perfectamente con la portada del libro, una introducción musical con arpa llanera y la nutrida asistencia de personas que le preguntaban por aquel personaje del que había ido a hablar.

Usted nos habla de deseo de infinito, ¿entonces la forma para finalizar ese deseo sería con la muerte? Se dice que estamos viviendo un momento de confusión; si nos tomamos en serio este libro, ¿podemos tener esta experiencia de los que lo conocieron y afrontar este momento de confusión? Somos profesores de música, ¿cómo transmitir esa experiencia a los jóvenes a través de la música para que no se pierdan? Frente a un libro de 1.200 páginas quisiera entender cómo encontrar esta novedad para que den ganas de leerlo.

Quizás a Julián se le haya quedado grabada la degustación gastronómica de la mañana dado el alcance de su respuesta:
«Yo animo a quien comience a leer este libro que lo disfrute como una buena comida o como un buen vino. Decía don Quijote que la mejor salsa de guiso es el hambre y así los pobres comen con más ganas; a quien no le mueva la vida con este libro no tendrá ninguna opción, mejor que ni lo lea; pero el que tenga alguna curiosidad o interés por la vida, en este libro va a encontrar el hambre, este libro no hace falta recomendarlo, quien lo empieza a leer se sorprende de que no avanza rápidamente porque no es un libro para leer rápidamente, superficialmente, está lleno de la vida de un hombre que se tomó muy en serio la vida y está lleno de riqueza. Entonces, frente a esta riqueza uno quiere que no se acabe nunca, es como una buena comida que uno quisiera comer siempre, claro está, sin engordar».

Gracias por invitarnos, nunca habíamos escuchado hablar de la fe así, ¿podemos hacer un encuentro con mis estudiantes? Vuélvanme a invitar a encuentros como estos. Son así los comentarios de los asistentes.
Llego a mi casa invadida por la riqueza de los encuentros, quisiera dormir, pero me queda la pregunta perturbadora para Julián: ¿cómo no traicionar esa belleza que le hemos mostrado a la gente esta noche?

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Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

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