El arte contemporáneo no es solo caos y nihilismo. En el mare magnum de corrientes y estilos diversos, el Meeting de Rímini ha querido identificar los “hilos de oro” que unen a una serie de autores y, en vez de exponer sus obras, las narra, con un original itinerario narrativo que impresiona y conmueve.
Con esta intención abre sus puertas la exposición “Mantener vivo el fuego. Sorpresas del arte contemporáneo”. Hablamos con su comisario, Giuseppe Frangi.
La exposición pretende acabar con algunos lugares comunes sobre el arte contemporáneo, ¿cuáles en concreto?
Más que acabar con ciertos lugares comunes, la exposición se propone mostrar a un público que lo frecuenta poco los aspectos más fascinantes del arte contemporáneo. Más que una exposición, en realidad es un itinerario que se desarrolla mediante la narración de siete situaciones a las que otros tantos artistas destacados en el panorama actual han sabido dar vida. El arte contemporáneo es un universo que normalmente juega a ser enigmático y esconderse ante la mirada de los visitantes, también debido a las lecturas totalmente herméticas que suele ofrecer la crítica. Normalmente se le presenta como un ámbito para iniciados. En cambio, los artistas en el fondo obedecen, como en cualquier otra época, a preguntas grandes y pequeñas. Como dice el título, “mantiene vivo el fuego” de un modo que nunca puede darse por descontado y que suele descolocar. Descubrir esta sencillez última es en parte el desafío de todo el camino propuesto en el Meeting. Como dice Damien Hirst, uno de los artistas elegidos para este itinerario y auténtica estrella del panorama artístico actual, “el arte permite entender algo de nuestro estar vivos que uno nunca habría llegado a entender”.
¿Qué artistas han elegido y con qué criterio?
Hemos elegido artistas vivos, todos reconocidos entre los más importantes en la actualidad. Los hemos seleccionado pensando en la diversidad de lenguajes que utilizan y en la eficacia de las situaciones que cuentan, puesto que nos dirigimos a un público que en su gran mayoría no está familiarizado con el arte contemporáneo. El criterio base de este itinerario es que toda gran expresión artística, hoy como ayer, da lugar a una experiencia en quien la mira, o mejor dicho en quien se encuentra con ella. Creo que este factor de la experiencia es una contribución muy útil que el arte contemporáneo ofrece para favorecer una mirada menos obvia y menos ritual también hacia el arte antiguo. Ese factor de la experiencia, que estaba unido a las grandes obras maestras del pasado, hoy casi siempre queda reducido a un discurso estético o cultural. Pero mirar, por ejemplo, a la Asunción de Tiziano del modo en que la interpreta Alberto Garutti, uno de los siete artistas elegidos para este itinerario, permite entender las perspectivas más profundas y comprometedoras, también respecto al arte del pasado.
Entre los artistas (u obras) expuestos, ¿hay alguno especialmente unido al espíritu del Meeting y al tema de este año (la ausencia)?
La experiencia de la ausencia es el primer movimiento que pone en marcha la energía creativa de cualquier artista. Así que todos tienen mucho que ver con el título del Meeting. Sin duda la performance de Marina Abramovic, que durante tres meses estuvo sentada delante de una mesa en el MOMA de Nueva York, acogiendo la mirada de los cientos de visitantes que se acercaban a ella, tiene un punto de conmoción difícilmente comparable. Abramovic buscaba un nivel de relación con el otro basado en la conciencia respetiva de un vacío y un deseo de colmarlo.
¿Cómo se estructura técnicamente la exposición?
La estructura es muy sencilla. Un video inicial, realizado con la colaboración de Giacomo Poretti, un gran apasionado del arte contemporáneo, ayuda a los visitantes a entender de un modo muy sencillo y eficaz cómo cambió el horizonte del arte en el siglo XX. Luego, en siete ambientes, los visitantes se sumergen en el relato, casi siempre mediante video, de otras tantas invenciones de artistas actuales. No hay obras, sino relatos de obras. Es un itinerario narrativo, porque la narración es el instrumento más eficaz para hacer salir a la luz la fascinación de estas experiencias, y abrir una brecha en la atención y curiosidad de un público para el que en su gran mayoría el arte contemporáneo es algo nuevo.
Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón