Va al contenido

NOTICIAS

Tatiana Kasatkina nos enseña un método para leer el mundo

23/08/2016

Tatiana Kasatkina, directora del departamento de Teoría de la Literatura en la Academia Rusa de las Ciencias, ha presentado en el Meeting los Escritos del subsuelo, de Dostoyevski.

¿Cómo nace esta nueva versión de las Memorias del subsuelo, convertidas en Escritos del subsuelo?
La nueva versión nace de la experiencia de una escuela de verano donde participaron profesores de varios países. Durante estas jornadas vimos que había grandes problemas con la traducción de esta obra de Dostoyevski. Hay problemas con todas las traducciones de obras literarias, pero en el caso de Dostoyevski es especialmente inadecuado el enfoque de los traductores, pues no son del todo precisos. En cambio, Dostoyevski es muy preciso en cada palabra que usa y es imposible traducirlo sin reconocer las citas que se ocultan en el texto, que son sobre todo citas bíblicas. Como consecuencia, esas citas acaban desapareciendo para el lector y nos encontramos así delante de otro texto, es decir, había desaparecido la trama interior, construida a partir de estas citas y reminiscencias.

¿Puede describir brevemente las características que debe tener la lectura de un texto como este?
Un texto como Escritos del subsuelo exige al lector un gran trabajo. Es un texto imposible de entender adecuadamente a la primera lectura porque para prestar atención a la trama interior, es decir, al lugar al que el autor intenta llevar al lector a través de todo este sistema de referencias diversas, hay que liberarse de la llamada trama vertical. Es inútil esperar que el libro fluya simplemente ante nuestros ojos para ver dónde va a acabar. En el caso de este libro, la trama en cierto sentido no acaba en nada.

¿Qué quiere decir?
En realidad, lo que sucede en cada página que pasa es una nueva comprensión del hombre mismo y de la posición que ocupa respecto a los elementos de este mundo. Pero para empezar a prestar atención a todo eso, hay que leer el texto hasta el final y darse cuenta de que no hemos entendido absolutamente nada, sobre todo en lo que se refiere a cómo se relacionan entre sí las dos partes del texto. Por tanto, hay que releerlo prestando atención a todos los momentos del texto donde el protagonista habla en primera persona, pues es ahí donde “podría” encontrarse la voz del autor. Porque el autor ha hecho lo que dice el protagonista. Descubrir el discurso del autor en la voz del personaje es precisamente el contenido de toda la segunda parte de esta nueva edición, que hemos subtitulado como “Los escritos del subsuelo como texto cristiano”.

¿Qué valor tiene entonces la lectura común del texto literario, ejemplificada en la sección metodológica de este libro?
Sin este paso es imposible todo el método de lectura “de sujeto a sujeto”. Cada persona tiene siempre su propio punto de vista y desde ahí ve el texto y el mundo entero. Se trata de una perspectiva muy determinada y para cambiarle hace falta la presencia de otro. Es imposible introducir este método con un curso sin más. El docente debe estar siempre en relación con aquellos a los que enseña porque ellos pueden ofrecerle nuevos puntos de vista de los que nacen nuevas perspectivas. Por ejemplo, hacen preguntas que el docente podría no haber pensado nunca. El que pregunta lo hace simplemente porque se encuentra en su punto de observación. Esta posibilidad de abrazar un determinado acontecimiento, un determinado fenómeno, solo se verifica cuando hay un grupo de personas que decide trabajar juntos y verifican hasta los más pequeños descubrimientos de todos los demás. Este método filológico que llamamos “de sujeto a sujeto” resulta, digamos, sumamente objetivo y verificable. Cuando un científico o un crítico literario trabajan solos, cada uno puede imaginar cómo ve el objeto pero esa opinión puede no tener nada que ver con lo que está presente en el texto. En cambio, aquí cada uno frena este vuelo de la fantasía gracias a los demás para volver siempre al texto y experimentar que su propia concepción puede no coincidir con el texto. Y entonces empieza la búsqueda auténtica.

¿Es posible introducir este método de lectura “de sujeto a sujeto” en la escuela?
Creo que sería indispensable si queremos que la literatura en las escuelas siga siendo una materia importante y no se vea relegada a los márgenes de la formación, como algo decorativo en comparación con los llamados conocimientos esenciales para el hombre.

Otras noticias

 
 

Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

Vuelve al inicio de página