LOUIS BOUYER
Tomás Moro
Ed. ENCUENTRO, 1987
El asunto histórico que ve como protagonista a Tomás Moro es bastante conocido. Estamos en la primera mitad del siglo XVI, un período de gran confusión y crisis en la Iglesia católica a causa de la división provocada por la reforma de Lutero. Inglaterra, patria del santo, no es afectada por el cisma hasta que razones políticomatrimoniales inducen al rey Enrique VIII a tomar posiciones cada vez más enfrentadas a la Iglesia de Roma, hasta llegar a la ruptura total.
Moro, hombre culto y amante de las letras, alcanza el culmen de su carrera pública cuando es elevado al más alto cargo de Estado: canciller del rey (todavía no cismático). Pero cuando el monarca intenta imponer a su colaborador opciones que contradicen la fe católica y la disciplina eclesiástica, Moro muestra un claro y decidido rechazo.
Empieza entonces una lucha entre las razones del poder y las de la libertad, apoyada en la fe. Tomás Moro no busca el martirio (como buen jurista, siempre intentará demostrar que su fidelidad a Roma no le impide ser leal a su rey), pero tampoco cede en ningún momento frente al compromiso con lo que es esencial.
La historia de este hombre y de su resistencia al poder (que L. Bouyer cuenta de forma sintética y extremadamente atrayente) es ejemplo y ayuda para la lucha que los cristianos deben sostener siempre en contra de todo nuevo poder.
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