Donde sólo el oscuro,
Donde sólo, tan solo, un hombre sin nombre;
Donde sólo la nada,
Donde tan solo un negro sol que mirar.
Luce una luz, brilla una esperanza.
Puedo sentir miles de brazos, un corazón,
Una sola voz.
Miles de estrellas, sólo un cielo,
Y hondas huellas, en mis pasos, al caminar.
Donde sólo el silencio,
Donde sólo, tan solo, lágrimas sin llanto;
Donde sólo el olvido,
Donde tan solo tristes anhelos que recordar.
Luce una luz, brilla una esperanza,
Puedo sentir miles de brazos, un corazón.
Una sola voz, una sola voz,
Miles de estrellas, sólo un cielo,
Y hondas huellas, en mis pasos, al caminar.
Dibujemos, pues, nuestra historia en el horizonte
Construyamos, pues, la historia con nuestras manos,
Con nuestra amistad, nuestra libertad, nuestra alegría,
Con nuestro amor, junto a Él.
Javier Ortega
(Texto de la primera canción española de C,L,)
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