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Huellas N.6, Noviembre 1984

EDITORIAL

Trabajad por esto

Cada hombre, cada grupo o comunidad, vive de certezas y cuando no existen certe­zas alrededor de las que se unen los hombres sólo cabe la disgregación y la duda, que trae consigo el miedo y paraliza la vida.

Por eso esta sencilla revista, que a pesar de los avatares difíciles que ha seguido va teniendo ya una historia, parte de una ilusión, de una única certeza: la conciencia de que el punto de partida de todo lo que hacemos, decimos y proponemos es el Acontecimiento de Cristo; la certeza de que la auténtica propuesta de liberación, de verdad y justicia proviene de la experiencia de la comunión cristiana.

Esta es nuestra humilde certeza, nuestra seria certeza, la certeza definitiva. Porque no estamos dispuestos, naturalmente, a ser decapitados y relegar nuestra fe al terreno de lo íntimo para luego enfrentarnos a la vida y comportarnos en el quehacer social y cotidiano según criterios distintos, cuando no opuestos, a esa fe.

Precisamente NUEVA TIERRA, lo hemos repetido hasta la saciedad, quiere ser pre­sencia de un juicio distinto sobre el mundo, de unos valores y unas propuestas que no corresponden a los criterios dominantes de nuestra cultura.

Hace tiempo Juan Pablo II, dirigiéndose a un encuentro de cristianos, hizo una pro­puesta extraordinaria: «construid la civilización del amor: trabajad por esto, orad por esto, sufrid por esto». Nosotros queremos hacer nuestra esta propuesta, que es una llamada al compromiso íntegro de la vida.

«Trabajad por esto» abandonando la tentación de lo espectacular y perseverando en el trabajo humilde y constante de hacer presente con nuestras vidas, nuestros jui­cios y nuestros actos el Acontecimiento que nos mueve y hacer así presente en todos los ambientes la huella del infinito, la presencia de Alguien más grande que nosotros mismos.

«Orad por esto» porque no es nuestra obra, porque para un cristiano sólo cabe la humildad y la súplica al percibir que toda la existencia es un regalo, un don, una gracia.

«Sufrid por esto» porque sólo se ama y se cree en aquello por lo que se está dispuesto a sufrir. Porque estamos seguros que el camino que hemos emprendido no estará nunca exento de fracaso, de la equivocación, de la incomprensión. «Si el grano de trigo no muere... »

La Revista NUEVA TIERRA, los que trabajan en ella, los que la difunden, sus amigos, hacemos nuestro el ideal y la propuesta del Papa, en quien hemos reconocido tantas veces a un amigo y a un padre. Con esta humilde ilusión volvemos a estar este año entre vosotros.

 
 

Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

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