La Iglesia ¿espíritu u organización? ¿realidad interna o externa? ¿de origen divino o humano?. Una serie de preguntas que mal contestadas son origen de muchas confusiones, por otra parte bastante corrientes y manejadas cada día.
El artículo publicado en estas mismas páginas por el Prof. D. Lamberto de Echevarría nos acercaba a la clave de la cuestión. La Iglesia porque está hecha de hombres y es para los hombres necesita un derecho. Y lo mismo podríamos decir sobre el punto que nos ocupa: porque la Iglesia está formada por hombres y es para los hombres necesita una organización.
Por supuesto esa organización está al servicio de la naturaleza y fin de la Iglesia; está condicionado por ellos y de ellos recibe su razón de ser.
La historia -aunque con pocos alumnos- es una gran maestra. Veinte siglos de Iglesia nos enseñan cómo ésta ha ido adaptándose en su organización a las circunstancias para mejor servir al hombre, para realizar la misión que el Señor, al fundarla, le encomendó.
Estamos en 1983. ¿Cómo está organizada la Iglesia en los distintos países del mundo y concretamente en España? Hay una realidad básica: no hay una Iglesia española y una iglesia alemana y una iglesia japonesa... No hay más que UNA IGLESIA UNIVERSAL, católica formada por todos los católicos y regida por el Romano Pontífice y los Obispos, sucesor de Pedro y los Apóstoles.
Después, en los distintos países los Obispos y fieles adoptan unas formas de organización para mejor realizar, en unidad, la misión de la Iglesia. Formas cambiantes, perfectibles sin duda, pero fruto de la experiencia.
El esquema de la organización de la Iglesia en España es sencillo:
- Todos los obispos forman la Conferencia Episcopal.
- Los obispos eligen cada 3 años un presidente y un vicepresidente. El presidente convoca, representa, coordina la conferencia episcopal.
- Para ayudar a la conferencia en algunas cuestiones especialmente internas, los cardenales (hoy 4 en España) forman el Consejo de Presidencia.
- Para trabajar en las distintas áreas de la acción pastoral existen 14 Comisiones Episcopales. (presididas por sendos obispos y formadas por 4-6 obispos). Estas comisiones son: Apostolado Seglar, Clero, Doctrina de la Fe, Enseñanza y Catequesis, Liturgia, Medios de Comunicación Social, Migración, Misiones y cooperación entre las Iglesias, Pastoral, Pastoral Social, Relaciones interconfesionales, Seminarios y universidades, Mixta de Obispos y Superiores Religiosos.
- Cada Comisión Episcopal para llevar a cabo su trabajo tiene un secretariado formado por expertos, sacerdotes y seglares, que realizan el trabajo que les encomienda la Conferencia y su respectiva comisión.
- Un Secretariado General del Episcopado (elegido cada 5 años) es el encargado de la información, coordinación y ejecución de las decisiones de la conferencia.
- Los obispos presidentes de las Comisiones Episcopales con el Presidente, Vicepresidente y Secretario, forman la Comisión Permanente del Episcopado.
- Un Comité Ejecutivo formado por 7 miembros, y que se reúne con más frecuencia, agiliza y prepara los trabajos de la Comisión Permanente y de toda la Conferencia Episcopal.
Y poco más. Hay algunos organismos u oficinas técnicas conectadas con el secretariado-General (Estadística , Gerencia) o con algunas comisiones (Agencia Prensa Asociada, Cáritas).
Cada diócesis, cada obispo no está subordinado a la Conferencia Episcopal. Cada diócesis, cada obispo está directamente unido en la Iglesia Universal, al Romano Pontífice; pero juntos y dividiéndose un trabajo común pueden servir mejor a las necesidades comunes, al bien de todos.
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