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Huellas N.6, Junio 2007

CL

Huellas en la universidad

a cargo del CLU

PUNTO&APARTE

Un curso repleto de acontecimientos: empezando por el más importante, el discurso de Benedicto XVI en Ratisbona, pasando por la «Carta a una profesora» y culminando con las elecciones universitarias del pasado mayo.
Un amplio espectro de eventos que nos han brindado la oportunidad de comprender que nada de lo que sucede nos es ajeno y que incluso el “sinsentido” de la tragedia ocurrida en la Universidad de Virginia sirve para profundizar en nuestra vocación como personas. El mundo y las estrellas son como la periferia de mi yo, explicaba don Giussani. En este sentido la experiencia universitaria es algo único. El pasado 22 de abril, en la Universidad de Pavía, el Papa afirmó: «Es de vital importancia que el compromiso de la investigación científica se abra al interrogante existencial del sentido de la vida misma de la persona». En numerosas ocasiones en este curso académico hemos podido ver hombres que viven a la altura de su humanidad, mostrando «saber vivir con toda la razón, con toda la hondura de nuestro pensamiento y voluntad» y «dejarse guiar en el camino de la verdad, que es un camino de valentía, humildad y purificación permanente». Esta doble página habla de hombres así que, expresando un insólito gusto por la realidad, han llevado novedad a la vida de muchos estudiantes.


ITALIA / ELECCIONES UNIVERSITARIAS
Matteo Forte
Ocasiones de encuentro


Las elecciones nacionales del 16 y 17 de mayo para la renovación del Consejo Nacional de Estudiantes Universitarios han concluido. La Coordinadora de Listas por el Derecho al Estudio (CLDS) ha obtenido diez representantes (3 en el distrito noroeste, 4 en el noreste, 2 en el centro y 1 en el sur). Ganar un tercio de los escaños ha sido un éxito, pero la verdadera victoria no es el resultado electoral. En los meses de campaña electoral los partidos han recorrido todos los ateneos italianos para captar votos. Sin embargo, los que han sostenido a sus amigos que se presentaban en las listas asociadas al CLDS, se han dedicado a tejer una trama de relaciones. Gloria, que se presentaba en Sesto San Giovanni por la Lista Abierta Objetivo Estudiantes, conoció a Mara, una estudiante de Mediación Lingüística. «Los de izquierda dicen que no les interesa pararse a hablar conmigo como hacéis vosotros –comentó–; solo quieren soltarme su panfleto. Me alegro de haberos conocido, porque entre vosotros hay un clima especial, un interés verdadero. Vosotros proponéis una amistad». En vía Mercalli, una sede separada de la Estatal de Milán, Giulia y Carlo se paran a hablar con Amedeo. Le proponen que les vote. Entonces comienza una larga discusión que termina en una cena juntos: «Me gusta que no os ocultéis detrás de un partido –confesó Amedeo–. Una vez participé en una reunión de chicos marxistas-leninistas; un hombre de unos sesenta años habló durante una hora de Lenin, leyendo pasajes de su biografía. Yo deseo conocer a alguien que no me hable de un hombre muerto hace cien años, sino de lo que verdaderamente deseo. Por eso os aprecio».
En resumen, «un buen resultado, sobre todo porque demuestra que en la Universidad cuenta quien está presente y no las siglas de un partido –apostilla Stefano Verzillo, presidente de CLDS–. Nos interesa la Universidad como un lugar donde podemos profundizar en la pasión por la búsqueda del significado de las cosas. Por esto nos comprometemos con la realidad concreta (clases, estudio, relación con profesores, servicios, elecciones, etc.) tratando de contribuir al bien común con nuestra experiencia».


MILÁN
Luca Tizzano
Laboratorios de Dante


Desde hace tres años tienen lugar en la Universidad de los Estudios de Milán los “Laboratorios de Dante”, en este curso dedicados a los cantos del Paraíso. El pasado 17 de abril el profesor Hollander, de Princeton, EEUU, dio una conferencia sobre los cantos XXI y XXII. El 3 de mayo me envió un e-mail diciéndome que la conferencia y la cena que tuvimos a continuación habían sido «de los momentos más conmovedores de mi carrera de profesor, en la que llevo más de 52 años». «Jamás pensé encontrar un “público” tan listo, interesado, amistoso y atento», continuaba Hollander. «Ha sido una experiencia inolvidable. Quiero dar las gracias a todos los que habéis organizado este encuentro, que permanecerán vivo en mi memoria con un sentimiento de gratitud, más aún, de amistad. Gracias –concluía–, espero que transmitáis mis sentimientos al resto de los asistentes. Os admiro mucho por haber organizado este acto de solidaridad con Dante». Admiración y gratitud confirmadas por otro e-mail que nos escribió una profesora de la Universidad de Pisa, Battaglia Ricci, que intervino el miércoles 4 de abril: «Estuve hablando con Bob Hollander en el pueblo de Certaldo, donde dimos una conferencia sobre Boccaccio. Estuvimos recordado juntos vuestros “Laboratorios de Dante”. Para nosotros, viejos lectores del poeta, esta experiencia ha reanimado el entusiasmo por una enseñanza que demasiado a menudo, culpablemente, olvida su sentido. Os doy de nuevo las gracias y os deseo un trabajo provechoso». Es realmente extraordinario que los profesores Hollander y Battaglia hayan aceptado la invitación de unos estudiantes que no conocían. Somos nosotros los primeros en asombrarnos al ver que el acercamiento a la Divina Comedia a través de los “Laboratorios de Dante” nos está abriendo el horizonte del estudio académico, pero también de la presencia en la universidad.


ROMA
Diana Chiuri
Una forma distinta de ser médicos


«¿Sois de CL? ¿Puedo estar con vosotros?». Se llama Elisabetta, nadie la conocía cuando se acercó a la mesa. ¿Elisabetta? ¿La mesa? Pero, ¿qué pasa? Todo comenzó con ocasión de la 83ª jornada de la Universidad Católica de Roma, cuando expusimos del 14 al 22 de abril la muestra “Cuidar y curar. Ojo clínico y ojo artístico”, presentada en una anterior edición del Meeting de Rímini. Se le ocurrió a Lorenza, Nicoletta, Benedetta, Giuseppe y Renata, casi por casualidad. Alguien había propuesto llevar la exposición a la Universidad y, una vez aprobada, se pidió a estos chicos del CLU que la presentaran. No había más opciones. Había que hacerlo. Así, entre clases y exámenes, el corredor principal de la universidad empezó a animarse con la gente que venía a verla. «En la mesa –cuenta Alida– siempre había alguien para dar información: se convirtió en el centro neurálgico de la entrada». La exposición favoreció muchos encuentros y supuso una fuerte provocación para entender el sentido de la profesión médica. La del médico-profesional-profesor, distante años luz de la del hombre común-paciente-enfermo. «Cada uno –continúa– tiene un montón de anécdotas que contar. Una señora que estaba ingresada, hablando del hombre y de su necesidad de “salvación”, delante del panel «Ama aquel que dice al otro: tú no morirás», empezó a llorar tapándose para que no se notara. Ante el panel sobre la “gratuidad”, que explica que dar la vida por los demás no es una cuestión de “piedad” sino de “humanidad”, un profesor, médico desde hace treinta años, me sorprendió diciendo: “Nunca lo había pensado”».


ERASMUS
Luca Pezzi
La carrera del oro


«El corazón desea lo mismo, ¡esté donde esté!», cuenta Laura. Estudia en Forlí, en la escuela de Interpretación y Traducción. A la espera de apuntarse en la especialización, Laura ha viajado a EEUU. Allí, en Cortland, «un pequeño pueblo de la campiña de Ohio» no parece haber nada más que los dos niños a los que enseña ruso. Sí, porque una de sus grandes pasiones es el ruso. Los niños se llaman Arthur y Karina, tienen tres años y medio, vienen de Kazán y, recientemente, han sido adoptados por la familia que la hospeda. Nada más llegar a la casa «me he dado cuenta que los padres desean dar a sus hijos la mejor educación posible, hasta el punto de interrogarse sobre su propia fe». Católicos por tradición, pero no practicantes, cuando vieron salir a Laura el domingo para ir a misa decidieron acompañarla, y llevar también a los niños. «A lo mejor les hace bien», decían. Antes no querían bautizarlos y ahora –dos meses después– se lo están pensando. La “carrera del oro” no ha terminado. Al igual que antaño se recorrían las praderas, se buscaban las minas más ricas, hoy, en un pequeño pueblo perdido de Ohio, hay alguien que desea lo mejor para sus hijos, y así descubre también lo que quiere para sí.