¿Existe un servicio “público” que supere la burocracia? En monza un ejemplo de excelencia para todos. A menos de que el estatalismo…
¿Se puede pensar en un servicio “público”, por ejemplo en el ámbito sanitario, que supere los límites de la burocracia, el estatalismo, el despilfarro, el centralismo y la ineficacia? Muchos hospitales públicos en Lombardía lo demuestran. Y no sólo. Existen también ejemplos de cómo la eficacia y la eficiencia crecen valorando ciertas iniciativas privadas con reconocido valor social, según el principio de subsidiariedad. Un ejemplo en este sentido es la “Fundación Monza e Brianza para el niño y su madre” (MBBM, Monza e Brianza per il Bambino e la sua Mamma), nacida en 2005 por iniciativa del Hospital San Gerardo, de Monza, la Fundación Tettamanti De Marchi (un ente moral dedicado a la investigación sobre las leucemias infantiles), y del Comité María Letizia Verga (constituido por padres, amigos y colaboradores) con el fin de valorar y difundir la experiencia de veinticinco años de terapias e investigación sobre las leucemias infantiles del Comité ML Verga, con resultados excelentes. A la Fundación MBBM se le confía una sección del Hospital San Gerardo para acoger e integrar en una estructura moderna y funcional las tres unidades de Obstetricia, Neonatología y Pediatría, conjugando y potenciando los niveles de excelencia en los ámbitos de la asistencia, de la investigación y de la formación.
La necesidad de esta virtuosa colaboración cuenta con razones simples y a la vez graves. La labor hospitalaria para los niños con leucemias, linfomas o enfermedades crónicas, para neonatos con problemas de nacimiento graves y para sus madres (sobre todo las que se encuentran en condiciones precarias y las inmigrantes recién llegadas a Italia), son siempre muy complejas desde el punto de vista diagnóstico y terapéutico, muy costosas y poco remunerativas. Es necesario, por tanto, ampliar el presupuesto contemplado por el servicio público a donaciones privadas y encontrar formas de gestión más estable con respecto a los frecuentes cambios de administración de los hospitales.
Por ello, se han confiado estas actividades a la Fundación MBBM, una estructura privada acreditada, cuyo presidente es también director general del Hospital San Gerardo. En base a un acuerdo, el hospital regula los costes de alquiler, personal y servicios que el Hospital San Gerardo presta a la Fundación MBBM; la Región de Lombardía, a través del Distrito Sanitario correspondiente, reembolsa el coste de las prestaciones; las asociaciones sin ánimo de lucro (Comité ML Verga y Fundación Tettamanti) desarrollan la labor de asistencia, investigación, mejora de las infraestructuras mediante las contribuciones voluntarias.
Con dos resultados: una mayor sostenibilidad económica y una continua mejora de la capacidad terapéutica y de la investigación. Algunos proyectos realizados han permitido una reestructuración significativa del área de Pediatría, con un incremento de 36 a 42 camas, la creación de una entrada y una sala de espera para el Hospital de Día Hematológico; otros proyectos están todavía por realizar: una planta para ingresos por quimioterapia y estancias cortas, y la sala de espera del área de Hematológica pediátrica y Trasplante de médula.
¿Logrará este prototipo sobrevivir y prosperar en una Región que ha hecho de la subsidiariedad su caballo de batalla política? La racionalidad y la conveniencia deberían llevarnos a responder que sí. A menos de que los vientos de renovado estatalismo que parecen resurgir, no lo impidan…
*Presidente de la Fundación para la Subsidiariedad