Huellas N.2, Febrero 2004

CL Cincuenta años de nuestra historia

Mundo. El nacimiento de los dos bloques

Daniele Federici

El año 1954 se inserta plenamente en el proceso mundial de formación y definición de dos bloques contrapuestos, representativos de los vencedores de la Segunda Guerra Mundial. Un año antes Eisenhower se había convertido en el nuevo presidente de los EEUU y el 5 de marzo había muerto Stalin en la URSS. Este último acontecimiento abrió una lacerante lucha por el poder de la que emergió como vencedor Nikita Kruschev, nuevo secretario del PCUS. El año 1954 representó también para el país soviético el inicio de tímidas aperturas respecto al periodo estalinista, con la revisión de algunos procesos políticos en curso y, desde septiembre, la rehabilitación de algunas víctimas del terror. Fue el año en que salió la novela de Ilia Erenberg con el significativo título de Deshielo.
Mientras tanto, continúa la carrera de armamento; en febrero de 1954 explotó la bomba H de fabricación americana y en el mismo año Estados Unidos adoptó una legislación que dejaba fuera de la ley al partido comunista norteamericano. Los EEUU fueron además los promotores de pactos militares de escala mundial encaminados a limitar la extensión del bloque soviético; en abril de 1954 se firmó el Pacto de Bagdad entre Iraq y Turquía, al que un año después se sumarían Gran Bretaña, Pakistán e Irán y el 8 de septiembre nació la SEATO (South East Asia Treaty Organization) que reunía a Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Australia, Nueva Zelanda, Filipinas, Tailandia y Pakistán.
Frente a la creación de los dos bloques contrapuestos, los países del continente europeo, dividido por lo que Churchill definió en 1946 como el “telón de ecero”, resultaban cada vez menos decisivos desde el punto de vista mundial. Por ello, comenzaron los primeros intentos de coalición entre varios países que habían sido enemigos en la guerra tan sólo diez años antes. No es casual que todo el 1954 estuviera dominado por la problemática de la ratificación del tratado CED (Comunidad Europea de Defensa) firmado en 1952, tendente a la creación de un ejército común europeo. Algunos temían un posible rearme de Alemania. La supresión de la CED por parte de la Asamblea nacional francesa el 30 de agosto marcó el final de este proyecto y supuso un batacazo para la política europeísta promovida en la primera posguerra por Schuman, De Gasperi y Adenauer. Y seguimos en Europa, donde la Conferencia de Berlín, iniciada en 25 de enero entre Francia, Gran Bretaña, EEUU y la URSS con el fin de resolver las problemáticas europeas, y en concreto el caso alemán, se cerró el 18 de febrero sin resultado alguno. 1954 vio también el fracaso de la Conferencia de Ginebra, que debía resolver la cuestión coreana; el armisticio entre las partes había sido firmado en abril del año anterior en Panmunjon. Hoy las dos Coreas siguen divididas.
En este periodo se afrontaron también en la escena mundial otras cuestiones que resultarán decisivas en los años siguientes. Comenzó el movimiento anticolonialista e independentista en el Tercer Mundo: 1954 fue el año de la rebelión de Argelia y de la expulsión de los franceses de la península Indochina. Por otra parte, la explotación del petróleo y el nacimiento del estado de Israel en 1948 afectaron de cerca al mundo árabe; en agosto de 1954 se cerró el contencioso jurídico entre Inglaterra e Irán vinculado a la nacionalización de las compañías petrolíferas y entre el 30 de junio y el 2 de julio Jerusalén fue el centro de violentos enfrentamientos entre palestinos y judíos.