Va al contenido

Huellas N.1, Enero 2005

PRIMER PLANO Moscú

El verdadero ecumenismo: anunciar a Cristo

Padre Romano Scalfi

Ofrecemos aquí la carta del padre Scalfi, que no pudo estar presente en la inauguración de la Biblioteca

Permitidme, en primer lugar, que dé las gracias de todo corazón a todos aquellos que con sacrificio y generosidad han contribuido a realizar esta obra. A todos los amigos que nos han ayudado, que son muchos, tanto en Rusia como en Occidente, aseguro en nombre de “Russia Cristiana” una oración agradecida y constante.
Esta obra que hoy se inaugura tiene una larga historia, a la que quisiera aludir para que se pueda comprender mejor y valorar este último fruto (por el momento) que inauguramos hoy: una historia que comenzó en 1957, cuando empezamos a ocuparnos de la situación del cristianismo en Rusia. Entonces éramos pocos y dispersos, pero ya nos movían algunas convicciones que después nos han acompañado durante todo el camino hasta ahora.
Nuestra primera intención era dar a conocer al pueblo italiano la riqueza de la tradición cultural rusa, y en particular de su tradición religiosa. Para amarnos es preciso conocernos; y para conocernos es necesario amarnos. Para llevar a cabo lo que considerábamos nuestra tarea, además de conferencias en ambientes católicos y de la enseñanza de la filosofía rusa en la Universidad Católica de Milán, creamos una revista –Russia Cristiana, L’Altra Europa, La Nuova Europa (318 números)– y una editorial, La casa di Matriona, que ha publicados cerca de 150 volúmenes.
Nuestra preocupación era ayudar a conocer y a amar la gran tradición de la cultura rusa y, a la vez, alentar la vida concreta de la fe en Rusia, dar a conocer la persecución llevada a cabo contra la Iglesia y el testimonio de los mártires cristianos. Nos apremiaba que los cristianos de Occidente no se olvidasen de los de Oriente, rezasen por ellos y se interesaran por los hermanos perseguidos. Queríamos ser la voz de los que no podían hablar.
Se cuentan por miles las Biblias y los Evangelios que hemos hecho llegar clandestinamente a Rusia afrontando distintos peligros.
El mismo espíritu que animaba nuestra actividad de un tiempo nos ha llevado hoy a fundar la Biblioteca del Espíritu. Estamos particularmente agradecidos a la Divina Providencia y a los hermanos ortodoxos que nos permiten obrar concordes en la inestimable obra de la misión. Estamos convencidos de que cualquier obra misionera que brote de una pasión común por Cristo es ya por sí misma un paso hacia la unidad. Si la pasión por la unidad no va acompañada de la pasión por anunciar a Cristo al mundo, el resultado que se obtiene es un ecumenismo cojo: “Amaos los unos a los otros, para que el mundo crea”. En la portada de una catedral románica están grabadas estas palabras: Ex multis unum ut mundus credat. Cuando mengua la pasión misionera (hablo de nuestras comunidades de Occidente) se ve afectado el ecumenismo, y viceversa. La misión tiende a convertirse en propaganda ideológica y el ecumenismo en una técnica mundana de ceremonias.
No tenemos estrategias particulares. Lo que más nos interesa es educarnos en un espíritu cada vez más ecuménico y misionero, confiar todo a la Providencia y a la protección de la Madre de Dios y estar atentos a todos los signos que la Providencia nos pone delante.
Nos preguntamos cuándo surgirá el alba radiante de la unidad completa entre católicos y ortodoxos. Pero los tiempos son de Dios. Nos basta saber que caminamos por la senda que Dios ha trazado para nosotros, que es el camino que conduce al florecimiento de la Iglesia y de las Iglesias y que a la vez produce el mayor bien también para la sociedad.
La cultura del relativismo, que domina tanto el Este como el Oeste y que lleva a la desintegración de la persona y de la sociedad, nos hace cada vez más conscientes de que lo que salvará al mundo de la ruina será nuestra unidad en nombre de Cristo.
En estos tiempos hemos meditado y hecho nuestras las palabras de san Basilio: «Da fuerza a tu Iglesia con la concordia». Esto es lo que deseamos y lo que esperamos que se cumpla junto a vosotros.

 
 

Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

Vuelve al inicio de página