Huellas N.09, Octubre 2022

LIBRO DEL MES

Aprender a mirar

Juan Miguel Prim Goicoechea

Massimo Camisasca
Don Giussani, su experiencia del hombre y de Dios
Ediciones Encuentro
pp.180-17 €

Los hechos y los dichos de Jesús han llegado hasta nosotros porque los testigos presenciales, sus discípulos junto con María, la madre del Señor, los pusieron por escrito, a manera de “apuntes para la memoria”, en lo que hoy conocemos como “evangelios”. Quienes “miraron hablar a Jesús” quisieron compartir esa experiencia con todos los que vendrían después, para que no se perdiera aquella riqueza inmensa.
Algo semejante hizo, tras la muerte de don Giussani en 2005, don Massimo Camisasca, sacerdote fundador de la Fraternidad Sacerdotal de los Misioneros de San Carlos Borromeo y, en la actualidad, obispo emérito de Reggio Emilia-Guastalla, quien ya nos había regalado tres volúmenes sobre la historia de Comunión y Liberación. Ediciones Encuentro publica ahora esta amplia biografía intelectual y existencial del sacerdote lombardo, en el centenario de su nacimiento.
Monseñor Camisasca conoció a don Giussani con catorce años, en las aulas del Liceo clásico Berchet de Milán. Fue tal el impacto, que ya no se separaría de él, afectiva e intelectualmente, hasta su muerte. A lo largo de catorce intensos capítulos el autor evoca «las palabras fundamentales que escuché de su boca (…) a través de una lectura sintética de sus escritos más importantes». Camisasca invita, a quien no tuvo la gracia de conocer personalmente a don Giussani, a adentrarse en su estilo comunicativo, «racional y al mismo tiempo apasionado, poético». Porque don Giussani «hablaba pintando». Su modo de ensimismarse con los relatos del Evangelio, que adquirían en sus palabras y en su rostro una contemporaneidad inaudita, su conocimiento del corazón humano, su atención a las circunstancias culturales, sociales y políticas del momento, su mirada paterna sobre cada persona que encontraba y que se convertía ya en amigo para toda la vida, todo ello se trasluce en las páginas de este libro que, como podemos leer en una reseña reciente, «es una de las mejores visiones de conjunto tanto de la vida del fundador de Comunión y Liberación como de la estructura de su pensamiento», escrita con «una fuerte potencia pedagógica» (José Francisco Serrano Oceja).
A través de estas páginas, bellamente escritas, podremos revivir el camino existencial de don Giussani, apasionado por la belleza, genial educador, discípulo conmovido de Cristo y padre de muchos, un don para la Iglesia y para una humanidad tan herida y necesitada de esperanza como la nuestra. Como pasa con María, que es «la que nos enseña a mirar a Jesús», mirando a don Giussani con los ojos de don Massimo Camisasca aprendemos a mirar a Cristo, la gran Presencia presente.