El día 23 de noviembre ha dado comienzo en la Escuela de Industriales un curso sobre "Pensadores y maestros contemporáneos". Lo dirige el P. Carlos Valverde, S.J.., catedrático de Filosofía Moderna en la Universidad Pontificia de Comillas en la Facultad de Ciencias Políticas, Director de la Revista católica de cultura "SILLAR", ensayista, etc. Así comenzamos a dar cumplimiento al compromiso que adquirimos este verano en Ávila de estudiar las fuentes de la cultura dominante actual. Con ello esperamos lograr un doble propósito: El primero, controlar la influencia que ideologías extrañas al Evangelio tienen en nuestra interpretación del mismo; y el segundo, conocer mejor los presupuestos ideológicos del mundo que tenemos que evangelizar con el fin de entender el verdadero alcance de sus interrogantes, y ser capaces de dar la respuesta adecuada en cada ocasión con la luz del Evangelio.
No es éste un empeño "sólo para intelectuales". Si guiados por la fe y por el amor a Jesucristo conseguimos poner nuestras vidas al servicio del Evangelio y no al de ideologías que con frecuencia se camuflan en el Evangelio; si amamos al mundo hasta el punto de dar contenido a una actitud crítica frente a toda ideología mundana que mutile la dignidad del hombre, entonces nuestra misión cristiana en el mundo estará bien hecha, al margen de que los hombres quieran dejarse iluminar por el Evangelio o no. Lo importante es que la luz que comunicamos sea realmente la del Evangelio.
Si logramos dejarnos penetrar por la luz del Evangelio quizá incluso estaremos en condiciones de reconocer destellos de esa misma luz en los "pensamientos de los hombres" que, al ser criaturas del mismo Dios, no pueden desprenderse totalmente de Él. El reconocimiento por nuestra parte de esos destellos nos permitirá, desde los puntos de coincidencia, abrir al mundo a la luz plena de vida del Evangelio, al amor redentor de Jesucristo.
Coincide el objetivo de nuestro curso con el tema que A. Leonard estudia en su libro "Pensées des hommes et foi en Jésus-Christ. Pour un discernement chrétien". Ed. Lethielleux. París 1982. Esperamos tenerlo pronto en castellano. Como aperitivo, valgan estas palabras de la introducción que sirven también para lo que nosotros nos proponemos.
"Sin prohibirles por ello su lectura, no dirijo esta obra a mis colegas del mundo universitario. La he escrito pensando en mis estudiantes... en todos aquellos y aquellas que, no teniendo una formación filosófica y teológica especializada, desean situarse cristianamente en esta inmensa feria de las ideas que es hoy la cultura profana y religiosa en Occidente. De ahí el subtítulo del libro: "Para un discernimiento intelectual cristiano". Al contribuir así a una mejor comprensión de la fe cristiana, creo prestar un auténtico servicio de Iglesia y no sólo hacer una obra de vulgarización. En efecto, la crisis que ha conmocionado a la Iglesia Católica occidental era y es aún esencialmente una crisis intelectual, un reto a la sabiduría cristiana.
La idea maestra que ha inspirado esta obra es que el modo como los cristianos comprenden su fe está muy a menudo determinado por una filosofía, implícita o explícita. Es en función de los "pensamientos de los hombres" como los creyentes, más o menos conscientemente, forman el horizonte de su cultura, meditan su "fe en Jesucristo" y acentúan una u otra dimensión de la misma.
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