Huellas N., Mayo 1983

IGLESIA

Allí donde la Iglesia me llama y de la forma que me llama, estaré siempre.

El pasado 12 de abril conocíamos todos ya, cuál era nues­tro nuevo Obispo: D. Angel Suquía Goicoechea, hasta entonces arzobis­po de Santiago de Compostela.
"Para mí este nombramiento supone -declaraba Monseñor Suquía- una gran responsabilidad y una extraordinaria carga que recae sobre mis espaldas. La preocupación de la responsabilidad que se me avecina espero llevarla con alegría, con optimismo, porque confío plena y totalmente en Dios y en la Virgen".
Datos como los familiares (16 hermanos) o sus estudios y anteriores cargos ya los conocemos por los diarios de estos días pasados: Hijo de una familia campesina, de clase media que se dedica ba a la labranza y a una pequeña industria de transportes.­
Terminada la segunda guerra mundial vuelve de cursar estudios superiores de Liturgia en Alemania, antes de ser ordenado sacerdote. Fue cura en un pequeño pueblo de Álava; consiliario diocesano de Acción Católica. Su tesis doctoral versó sobre "La Santa Misa en la espiritualidad de San Ignacio de Loyola". Fue profesor y rector del Seminario de Vitoria. Ha pasado por las dióce­sis de Almería, Málaga y Santiago. Sus aficiones son la música clásica y moderna, la natación y el montañismo. Cabe destacar su actitud de servicio ante el nombramiento, así como su vivencia, en el trabajo y el servicio de cada día, de la virtud cristiana de la esperanza.
El mismo escribiendo sobre el Papa decía: "Todo el que recibe de otro un cargo en la sociedad o un ministerio en la Iglesia se pregunta a sí mismo más o menos explícitamen­te: ¿cuál es la situación real de la que voy a responsabilizarme ahora?­¿cuáles son los problemas más o menos graves y urgentes que debe afrontar y resolver?
El inventario de bienes que firmo en mi "toma de posesión" ¿es para mí más carga que gozo, o más haber que debe?" (1)
Estas palabras suenan a todo un pro­grama de acción pastoral al frente de la diócesis de Madrid, y suena también a llamada a una respuesta de todos nosotros.

(1) SUQUIA, A. - Juan Pablo II y el Hombre
Cuadernos BAC, nº 24 - MADRID 1979