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Huellas N.5, Mayo 2007

IGLESIA - Misión / Fraternidad San Carlos

Tras las huellas de Enrique V

Marco Aleo

Esta vez os quiero contar algo sobre la escuela en la que enseño. Un día hice a mis alumnos algunas preguntas que había preparado con Martino. La primera era: «¿Qué esperas de este año?». Las respuestas fueron todas de este estilo: «Quiero pasar de curso, quiero portarme bien». Todas las intenciones estaban dirigidas al futuro. Y el presente, ¿dónde estaba? Su deseo de tener una vida plena hoy, ¿dónde se había quedado? ¿Es probable que bajo la influencia de su ambiente cultural la máxima aspiración se haya convertido en la de ser buenas personas? Así, en la clase siguiente les hice otra provocación: «¿Qué diferencia hay entre qué cosas quiero y quién quiero ser?». Llegamos a hablar de la promesa de cada comienzo, de cada aventura. Me viene a la cabeza el grito de Enrique V antes de la batalla: «Todo está preparado si el corazón está preparado». Es decisivo descubrir el propio corazón. Además, a los trece años, con la vida por delante, no se puede empezar con el deseo ya reducido. Así que surgió espontáneamente otra pregunta: «¿Qué es el corazón?». Un chico se atreve a responder: «Un órgano que hace circular la sangre».
Llegamos a la afirmación de que nuestro corazón, hoy, desea la felicidad, la plenitud del amor, la belleza. Y después seguimos con otras cuestiones. Les pregunto si nunca han estado tristes. Al final llegamos a una conclusión: la tristeza es signo de que deseamos ser felices. Pero esto no me basta y sigo “acosándolos”: «¿Ser felices quiere decir no tener problemas?». Y sigo: «¿Habéis visto a alguien “feliz” incluso en los problemas; alguno capaz de traspasarlos?». Con esta pregunta y con su fervor a la hora de responder se terminó la clase. Una clase así es un acontecimiento para mí. No la puedo predecir, aunque la pueda preparar. Es un trabajo que no hay que dar por descontado: en clase tengo 46 niños de trece años, ¡imaginaos! Pero apelar así a su propia conciencia es el punto de partida privilegiado para llegar a Cristo. Porque desde este conocimiento es desde donde se despierta el interés por la realidad, donde nace un verdadero compromiso con ella. Veremos lo que pasa. De todos modos pretendo seguir por este camino: me conviene sobre todo a mí. Un cariñoso saludo.

 
 

Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

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