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Huellas N.7, Julio/Agosto 1981

IDENTIDAD

Construid comunidades vivas en los ambientes

Juan Pablo II

El Papa a los estudiantes

Citamos aquí, traducidas por nosotros, las palabras que Juan Pablo II dirigió a un grupo de estudiantes católicos (Roma 16-1-81) que subra­yan la importancia del ambiente en la formación de la personalidad cristiana.

1. VIVIR EL AMBIENTE, PROVOCACIÓN A UNA POSTURA DE FE
Para vosotros, que pertenecéis al mundo estu­diantil, tanto vuestras inquietudes, como vuestras esperanzas y vuestras acciones están caracterizadas por vuestra situación particular, transitoria por de­finición. En efecto, estáis viviendo un periodo de formación en el cual las preocupaciones personales inmediatas y las de vuestro futuro profesional, fa­miliar y social no pueden dejar de tener un espacio importante. De esta manera, os hacen particular­mente capaces de percibir los cambios en curso y las necesidades de vuestro mundo.
Mientras estudiáis, vivís también en el ambiente escolar y universitario, que tiene como fin la difu­sión y el progreso del saber y de la cultura, pero que es al mismo tiempo un lugar en el que os encontráis con una multiplicidad casi indefinida de técnicas, de mensajes, de propuestas y de ideolo­gías que tenéis que afrontar. Es allí donde voso­tros estáis llamados a formaros, a motivar vuestra decisión y a dar testimonio de vuestra fe en el Se­ñor Jesucristo, quien nos ofrece, como he indicado más veces y en particular en mis dos encíclicas, la verdad del hombre en relación indisoluble con la Verdad de Dios.

2. SUPERAR EL DUALISMO FE-VIDA; LA FE UNA POSICIÓN CULTURAL
Este es el motivo por el cual, queridos amigos, os sugiero que vosotros atendáis ante todo a lo esencial. Por vuestro bautismo y la profesión de fe de la Iglesia, sois hombre nuevos, según las pa­labras de San Pablo. Estad verdaderamente conver­tidos al Señor, empapados hasta dentro en vues­tras decisiones vitales por el espíritu de las bienaventuranzas, preocupados por una intensa vida es­piritual, sobre todo eucarística. Esto es el funda­mento: programas, discusiones, debates de vues­tros movimientos no servirán para nada sin esta profunda raíz religiosa y espiritual. Sed testimonio de la Verdad. Buscadla en vuestros estudios y en las disciplinas que ellos os imponen. Ello puede con­tribuir en el modo más amplio posible a vuestro desarrollo intelectual, a daros el sentido de la com­plejidad de la realidad no solamente física sino hu­mana, la capacidad y la voluntad de no quedaros nunca en posiciones demasiado simples. Profun­dizad también, como acabo de decir, en vuestra identidad de jóvenes intelectuales católicos.
Una de las tareas que os atañen es la de supe­rar, en el pensamiento y en la acción, la dicoto­mía marcada por diversas corrientes de pensamien­to, tanto antiguas como contemporáneas, entre Dios y el hombre, entre teocentrismo y antropro­centismo. Cuanto más quiera vuestra acción, como la de la Iglesia, centrarse sobre el hombre, más tie­ne que buscar abiertamente su centro en Dios, es decir orientarse en Jesucristo hacia el Padre (cfr. Dives in Misericordia, número 1 ).

3. ANUNCIAR A CRISTO A LOS PROPIOS COMPAÑEROS Y CONSTRUIR COMUNIDADES CRISTIANAS EN EL AMBIENTE
Esto, queridos amigos, implica el necesario acatamiento al magisterio de la Iglesia. Con esta fide­lidad a la Verdad íntegra os ponéis al abrigo de las tentaciones de la pura ideología y de su agita­ción, de los slogans simplificadores, de las consig­nas en pro de la violencia que destruye y no cons­truye nada.
Estos son algunos principios que quería recor­daros para guiar vuestro deseo de profundización y de acción. Tomadlos como referencia para anun­ciar incansablemente el Evangelio a vuestros com­pañeros y colaborar en la construcción de vivas comunidades cristianas en vuestro ambiente; así haréis crecer también la participación de los jóve­nes en vuestros movimientos.

 
 

Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

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