Va al contenido

Huellas N.06, Junio 2020

EDITORIAL

Un camino para volver a empezar

Ahora se llama así, «fase dos». Y está bien, aunque la frontera entre «antes» y «después» es mucho más vaga que una fecha en el calendario y nos sigue teniendo con el corazón en un puño. El comienzo de la etapa que sigue al momento más agudo de la pandemia no es igual para todos. Solo llega para algunos, mientras que otros todavía están en medio del drama o incluso a punto de entrar en lo más duro ahora (pensemos en América Latina y África, donde muchos miran con una aprensión más que comprensible). Está claro que hay muchas expectativas, es grande la esperanza que se pone en una expresión como «volver a empezar». ¿Pero qué hace falta realmente para volver a empezar?

Reglas y procedimientos, sin duda. Comportamientos responsables que ayuden a apagar los fuegos del virus y evitar que vuelvan a encenderse. Repartir tareas entre todos porque mientras la curva de los contagios decae, la de la crisis económica corre el riesgo de dispararse. El listado de cosas útiles e indispensables podría continuar, pero antes de todo eso hay una condición. La que Julián Carrón, responsable de CL, resume en el título de su último libro, publicado hace unas semanas, El despertar de lo humano. De la pandemia «saldremos cambiados, pero solo si empezamos a cambiar ahora», afirma en ese texto. Es decir, «si estamos presentes en el presente y aprendemos ahora a juzgar lo que estamos viviendo». Es decir, si nuestra humanidad se ve despertada.

Hemos querido profundizar en este punto. Comprender qué es ese despertar, qué rasgos tiene. Con las palabras de una serie de personajes que han querido medirse con las ideas contenidas en ese libro (tenemos hasta seis entrevistas en el Primer Plano, es un hecho insólito, pero nunca como en este momento ha sido un regalo tan grande encontrar compañeros de camino que nos ayuden a profundizar en lo que está pasando). Son testimonios de personas que muestran cómo el impacto con una realidad dura, de una crudeza inesperada, en vez de mortificar nuestra libertad puede provocarla, moverla, despertarla. Puede suscitar preguntas agudas y una tensión alerta en busca de respuestas. Puede hacernos llegar a una conciencia de nosotros mismos y de los demás –del valor de nuestro yo y de la realidad– que antes no teníamos. Porque la verdadera prueba de estos días, más aún que los test y análisis serológicos (importantísimos, por supuesto), será vernos en acción. Identificar los signos de esta humanidad despierta, en nosotros y en los demás. Y darles espacio, seguirlos. Para no interrumpir el camino.

 
 

Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

Vuelve al inicio de página