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Huellas N.09, Octubre 1998

LIBROS CLAVES

El sábado de la historia

J. Ratzinger - W. Congdon
Ediciones Encuentro, 1998

El diálogo entre dos personalidades de la cultura es un recurso utilizado en ocasiones por las editoriales para presentarnos obras de gran riqueza. Sin embargo, la fórmula utilizada por la sucursal italiana de The Foundation for Improving Understanding of the Arts (promotora del libro que nos ocupa) podemos consi­derarla, cuando menos, ori­ginal.
Los responsables del pre­sente volumen no han sen­tado frente a frente en una mesa a dos interlocutores para que dialogaran sobre sus ideas, sino que han res­catado un antiguo -que no viejo- texto de los años sesenta de monseñor Jo­seph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, y lo han confrontado a los textos y cuadros nacidos de la crea­tividad de William Cong­don, pintor americano, uno de los máximos y más origi­nales exponentes de la ac­tion painting, recientemen­te fallecido.
El resultado es una sorpren­dente sintonía entre ambos "monstruos" de la cultura. Ese «sábado de la historia» a que hace referencia el título es, en palabras del Cardenal, «...este singular entretejido de oscuridad y de luz, de dolor y de esperanza, de ocultación y de presencia de Dios», que, en la experiencia cristiana, tiene su máximo exponente en las horas que transcurren desde el final del Jueves Santo hasta el gozo de la Pascua; una oscuridad, añade, en la que «... la luz está esperando». Es la experiencia del hombre de todos los tiem­pos, del hombre antiguo, del hombre medieval, del hombre contemporáneo. Y así lo expre­sa Congdon: «Pinto sobre negro porque pintar no es representar una luz que existe y basta sino más bien participar de la luz que está derivando desde la oscuri­dad (...) Cada cuadro era la réplica de una lucha entre vida y muerte en la palestra de mí mismo»
mismo».
Y, después, los cuadros. Porque el texto no es una excusa para presentar la obra de Congdon, sino el contrapunto ideal de la expresión de un modo de ver la vida que se fija, antes que en cualquier otro punto, en el cora­zón del hombre. Además, reco­nozcámoslo, tener en casa una antología de William Congdon compuesta por cuarenta obras, reproducidas con una enorme calidad y comentadas por Rodolfo Balzarotti, es una tenta­ción a la que ningún amante de la pintura debería oponer resistencia.

 
 

Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

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