Huellas N.7, Julio/Agosto 2006

SOCIEDAD Tiempo de educar en Chile / Educar es un riesgo

Una fidelísima entrega

Javier Bossart

Cuando en el mes de abril decidimos comenzar en Chile con la campaña Emergencia Educación, no podíamos imaginar cómo los hechos que sucederían corroborarían el contenido de nuestra propuesta. Al cabo del tiempo, el 26 de mayo, en una repleta Aula Magna de la Universidad de Chile, D. José Luis Samaniego, decano de la Facultad de Letras de la PUC de Santiago y a Gian Battista Bolis, Secretario general de la Universidad Sedes Sapientiae de Lima, nos abrieron a una comprensión mayor del libro de Giussani

El primer mes estuvo dedicado a recolectar firmas y colaboradores dentro de las personalidades destacadas en el ámbito de la educación. Rápidamente, premios nacionales de educación, rectores y decanos de universidades, directores y profesores de colegios, políticos, etc, adhirieron con su firma a la campaña.
Una segunda etapa –y central– consistió en la presentación del libro Educar es un riesgo. Para esto invitamos a D. José Luis Samaniego, decano de la Facultad de Letras de la Pontificia Universidad Católica de Santiago y a Gian Battista Bolis, Secretario general de la Universidad Católica Sedes Sapientiae de Lima. Fue muy hermosa la preparación de la presentación por parte de José Luis Samaniego. Dándose cuenta de que el libro no era un tratado teórico, pidió que uno de nosotros se reuniera con él para sesiones de lectura y conversación de los distintos capítulos. Me tocó a mí acompañarlo.
El trabajo de lectura que se extendió por unas tres semanas fue serio y sencillo: se trataba de buscar comprender qué quería decirnos don Giussani. Cuando tocaba realizar la última sesión, ocurrió un hecho que creo nunca olvidaré: cuando llegué a la oficina del decano, después de sentarme frente a él, tomó un lápiz y una hoja y me dijo: «Ya que tú has sido educado en el método de don Giussani, cuéntame qué ha significado para tu vida». Mientras él tomaba apuntes, traté de relatarle lo más fielmente posible lo que había sucedido en mi vida desde que conocí a un profesor en el colegio hasta hoy; cómo esta educación se había vuelto el factor más determinante de mi vida y de mi personalidad.
Contemporáneamente, comenzó en Santiago y en otras regiones del país una masiva movilización estudiantil, con cientos de colegios (cientos de miles de estudiantes) en paro o en toma a los que, después, se añadieron algunas universidades. El hecho de haber estado realizando la campaña nos ayudó mucho a estar atentos de forma novedosa y comprometida con nuestros alumnos durante estos días. Muchos estuvimos con ellos dialogando, discutiendo y acompañándolos.
Llegó el día de la presentación del libro de Giussani, el 26 de mayo. En una repleta Aula Magna de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, D. José Luis hizo una fidelísima entrega de todo lo que había comprendido. Por este motivo Gian Battista Bolis prefirió enfocar sólo algunos puntos neurálgicos, entre ellos, el “corazón”. Con gran intensidad y pedagogía permitió a los asistentes comenzar a comprender este aspecto tan novedoso del pensamiento de Giussani. Tan novedoso que lo que dijo del corazón significó para José Luis un «cambio total en la forma de ver el mundo», según nos contó la primera vez que nos vimos después de la presentación, una novedad absoluta sobre la cual quiere empezar a profundizar. Y su deseo es tan serio, tan real, que ha empezado la lectura de otros textos de Giussani y nos ha ofrecido su ayuda para dirigir junto a nosotros los grupos de trabajo que se están formando con los que se apuntaron para leer Educar es un riesgo.