Huellas N.7, Julio/Agosto 2006

SOCIEDAD EncuentroMadrid 2006

Educar es un gusto

Raquel Martín

«Para educar no puede darse por descontado que el joven o el adulto tengan deseos de aprender, de educar o educarse. Hay que comenzar a despertar el interés y la humanidad de los estudiantes para poder empezar a transmitirles algo».
El EncuentroMadrid 2006 arrancó su tercera edición coincidiendo con la publicación de un artículo de Julián Carrón en el diario El Mundo en el que además de lanzar esta flecha al debate sobre el problema educativo en nuestro país, añadía que era necesario que los jóvenes hastiados o los adultos tristes con los que coincidimos todos los días encontraran «algo que sea suficientemente verdadero y atractivo como para poner en movimiento el dinamismo de su libertad». Este ha sido el móvil y también el objetivo del EncuentroMadrid 2006 con el lema “El riesgo de educar”

Los organizadores de la tercera edición del EncuentroMadrid han trabajado a lo largo del curso con el deseo de plantear ante la sociedad española el valor de la educación, con la intención de despertar un interés por lo que sucede, debatir en torno a los principales problemas de nuestro país, levantar el asombro ante la humanidad de unos jóvenes alemanes de Munich en pleno nazismo a aquellos espectadores que acudieran a la exposición sobre “La Rosa Blanca”, y abordar la cuestión educativa en el cine mediante la proyección “¿Dónde está el amigo que siempre busco?” o el problema del dolor para los profesionales que viven en contacto con él día a día.

Sumándose a la Campaña
EncuentroMadrid 2006 ha sido el marco en el que, el sábado 16 de junio, se clausuró la Campaña Tiempo de Educar gracias a la cual hemos ido aprendiendo a lo largo del curso qué significa educar. La educación sobrepasa el ámbito puramente académico o didáctico del mundo de los colegios o de la universidad. Gracias también a la Campaña, con su manifiesto y la multitud de foros de encuentros desarrollados en estos diez meses, hemos identificado el núcleo de la educación que tantos quebraderos de cabeza da a los padres: la relación con la realidad que remite inexorablemente al Misterio y la importancia crucial de la libertad a la hora de educar. Mediante la campaña se han entablado relaciones con destacadas personalidades de la cultura española como Manuel Pizarro, José Jiménez Lozano o Juan Manuel de Prada, contribuyendo en cierta medida a plantear el debate educativo en nuestro país.

Un bien para todos
En el acto de clausura de la campaña, que llevaba por título “Libertad de Educación, un bien para todos”, Angel Mel, responsable de la campaña, recordaba que «sólo la educación es capaz de construir al sujeto y a la sociedad en la que éste vive» y que, aunque la campaña formalmente había concluido, «queremos seguir encontrándonos con todos aquellos que nos enseñan una forma verdadera de vivir, a descubrir cada vez más el Misterio bueno del que nace toda la realidad, los que tienen esta pasión por la persona y por su libertad. La tarea de educar continúa y es responsabilidad de todos. Nuestra necesidad es ser educados constantemente».
En el acto también participó el Director General de Centros Docentes de la Comunidad de Madrid, Javier Restán, quien destacó que la libertad de educación «no es un problema originalmente político y de leyes, sino que está vinculada totalmente a la capacidad de una sociedad para sostener la tarea educativa, es decir, está ligada a que existan en la sociedad personas y grupos que quieran educar. La libertad de educación es ante todo un termómetro de la salud de una sociedad».
Invitado principal al acto fue Charles Glenn, uno de los mayores expertos del mundo en sistemas educativos, catedrático de la Boston University de EEUU, quien realizó toda una apelación al derecho de los padres a elegir el centro educativo de sus hijos. «Negar la libertad de elección de los padres es injusto e indigno en una sociedad libre», aseguró el autor del libro El mito de la escuela pública, publicado por Ediciones Encuentro.

De la Constitución al Estado confesional
Verdaderamente novedoso fue el juicio que los tres ponentes elaboraron en la mesa del sábado por la mañana sobre las reformas estatutarias promovidas por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Novedoso en tanto que correspondiente con el deseo de los asistentes de conocer la verdadera naturaleza de los cambios que se están dando en la realidad española, su trascendencia y el tipo de mentalidad que subyace a esas reformas.
«Vivimos en un país intelectual y moralmente enfermo» diagnosticaba Alejandro Llano, director del Departamento de Filosofía de la Universidad de Navarra. A continuación expresaba su mayor preocupación en relación al momento que atravesamos: «estamos viviendo un proceso de manipulación donde lo fundamental no está siendo la capacidad de los que manipulan, sino la apatía de los que nos dejamos manipular. Vivimos en una docilidad gregaria que no dice “no” a nada, que lo asume todo; es necesaria una sociedad civil que conspire lealmente por el bien común».
Precisamente es el bien común lo que en general ya no persigue la clase política actual, como señaló Fernando de Haro, director de Informativos de Popular TV, citando a Giussani: «La manera de hacer política que se ha impuesto en este momento es la que utiliza y analiza la realidad conforme a un esquema ideológico y, por tanto, es violenta».
Gracias a Dios, no siempre fue así, atestiguaba Gabriel Cisneros, diputado del Partido Popular y uno de los ponentes de la Constitución de 1978. Según él, el bienio que precedió a la elaboración a nuestra Carta Magna fue “portentoso”. A la situación actual, han contribuido tres elementos: la esclerosis de los partidos políticos, la falta de solidaridad del actual presidente del Gobierno con el “espíritu del 78” y la falsa reinterpretación de nuestra Historia.

Redefinición de derechos
Los nuevos Estatutos de Cataluña y Andalucía hacen una redefinición de los derechos fundamentales consignados en la Constitución (derecho a la vida, a la familia, a la libertad religiosa, a la libertad de educación). Esta redefinición no es neutral, sino que obedece a una ideología concreta. «El capítulo de derechos y deberes –señala Fernando de Haro– expresa una mentalidad que está convencida de que no existe la verdad; que no hay nada objetivo, todo es lo mismo, todo vale igual. Todo aquello que deseo, aunque no esté en la naturaleza de las cosas, debe convertirse en un derecho. Es nihilismo político».
«No son derechos humanos, son derechos de tercera generación», destacó el profesor Llano, intentando explicar los orígenes de la mentalidad que ha modelado estas reformas: «La ideología que ha arrollado en estos 30 años en España ha sido el neoliberalismo, que ha llegado a la gente mediante el consumismo y no ha encontrado ninguna resistencia intelectual. Todos los gobiernos van a favor de esto: la economía no se puede tocar; además, en España se ha producido una decadencia del sujeto cristiano. Falta la savia y no se acepta la diferencia (planteamiento radicalmente cristiano); por eso nos vemos inmersos en un proceso de homologación».
El resultado de esta manipulación de los derechos y, en definitiva, de los deseos de los hombres y su libertad religiosa es el surgimiento de un Estado confesional. «El nuevo Estado ya no protege el bien jurídico de la libertad religiosa –apuntó Fernando de Haro–; sin embargo, sí protege la diversidad, el multiculturalismo. El cambio es muy importante. El nuevo Estado ha dejado de ser aconfesional para convertirse en un Estado confesionalmente multiculturalista. Profesa y hace profesar a sus súbditos la religión de la diversidad».
Por tanto, uno de los filósofos más creativos en este momento en España, Alejandro Llano, y uno de los padres de la Constitución del 78, Gabriel Cisneros, se midieron en esta edición del EncuentroMadrid con uno de los juicios del Manifiesto de la Campaña Tiempo de Educar: el referido a la vinculación de la realidad con el Misterio que la crea. Pero también uno de los líderes empresariales más relevantes de la actualidad, Manuel Pizarro, presidente de Endesa, dio todo un testimonio en este sentido.

La libertad de Endesa
Lo hizo en la inauguración del EncuentroMadrid en un acto centrado en la libertad de empresa. Pizarro esgrimió las razones por las que resiste desde la presidencia a todo tipo de pretensión pública de hacer saltar por los aires la legalidad vigente. El origen de su resistencia a la OPA de Gas Natural no se debe exclusivamente a razones técnicas. Pizarro tuvo el valor de testimoniar que el origen de su libertad frente al poder es la fe, la relación con el Misterio. Una vez más, una de las personalidades empresariales más importantes en España se midió en su intervención con el Manifiesto de la Campaña y resaltó el valor de la tradición en la tarea educativa.
«La tradición es fundamental para afrontar el presente. Desgraciadamente en nuestra cultura hemos tirado por la borda esa tradición», afirmaba Pizarro para añadir que sólo desde la tradición es posible llegar a la convicción sobre la realidad. Por ello, puso sobre la mesa el reto que plantea en nuestra identidad el problema inmigratorio en España.
Libertad, tradición y relación con el Misterio. Fueron los tres pilares del debate con Pizarro con los que en su opinión, debe comenzar toda tarea educativa en la sociedad. De lo contrario, la destrucción.

Construyendo
En este sentido, el presidente de Endesa, citó un texto de José Jíménez Lozano –“Los comedores de higos”– en el que el Premio Cervantes establece un paralelismo entre la situación de barbarie tras la caída del Imperio Romano y la situación actual en España y de Occidente.
Una de las novedades de este EncuentroMadrid 2006 ha sido la colaboración de más de 200 voluntarios distribuidos en diez comisiones. Sin cobrar un euro, han trabajado intensamente antes, durante y después del fin de semana del evento. «¿Cómo es posible que alguien, después de un fin de semana trabajando a destajo te dé las gracias?», se preguntaba el coordinador de los Equipos de Trabajo, Miguel Ángel Blázquez. Ha sido posible porque para cada uno de ellos el EncuentroMadrid ha sido algo “suyo”. «El EncuentroMadrid lo haces tú» era una de las cuñas de la organización que se oía constantemente desde megafonía. “Lo haces tú” para ti y para el mundo, creando un lugar de vida, cuna de civilización para todos los que lo necesitan.

La belleza que todos buscamos
A la vista del esfuerzo que supone organizar y sostener el Encuentromadrid, la implicación de aquellos que voluntariamente ofrecen su tiempo y su esfuerzo para trabajar en el EM se va convirtiendo, edición tras edición, en una de las expresiones más bellas de este evento.
Como lo es también la música, que siempre ocupa un lugar privilegiado en el EM. La presencia entre nosotros de la Orquesta de Flautas de Madrid permitió a niños y jóvenes acercarse de un modo sugerente y atractivo a la música clásica y a los adultos entender el papel educativo que ésta puede desempeñar. Se contó igualmente con la presencia de Hisako Hiseki, reconocida intérprete de piano que, gracias a la amistad nacida con la comunidad de CL de Barcelona se ofreció a participar gratuitamente en el EM. En una velada musical inolvidable, deleitó a todos los asistentes con piezas pianísticas de Mozart y de Albéniz, expresivas de la belleza que todos buscamos y deseamos.