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Huellas N.8, Septiembre 2005

SOCIEDAD Meeting 2005

El restaurante Don Chisciotte. La sorpresa de la gratuidad

Manuel Eusebio

Por tercera vez, las dos últimas de forma consecutiva, el Meeting de Rímini, dentro de sus múltiples ofertas, ha contado con un Restaurante español, gestionado íntegramente por españoles. Era la respuesta a una invitación hecha por Giorgio Vittadini, presidente de la Fundación para la Subsidiariedad, a la comunidad española de CL. Por el restaurante han pasado durante estos días personas como José María Aznar, Albacete, Julián Carrón, Carras, Vittadini, Nembrini y Savorana. Pío Moa y tantos otros amigos que se han encontrado con los españoles del Meeting.
Durante 10 días, unas 70 personas, en algunos casos familias enteras, han dado su tiempo libre de forma gratuita para colaborar en la realización del Meeting, en la forma concreta de un Restaurante. Durante estos días, entre paellas, sangrías, ollas sucias, madrugones, risas y cansancio se ha ido desvelando una envidiable compañía, una alegría última en todo lo que hacíamos, una forma de tratarnos, mirarnos y trabajar que dejaba traslucir algo más grande dentro de todo la parafernalia que se veía: una unidad que solo Cristo puede generar. Cuando por la mañana íbamos juntos a misa antes de acudir a trabajar, era evidente que el día lo construía Otro y que nosotros teníamos que decir que sí. Como dijo Cesana en el encuentro con la militancia, fregar platos tiene que ver con el Destino o es una perdida de tiempo
Uno de los días tuvimos una charla con dos matrimonios amigos que estaban trabajando en el restaurante Eduardo y Mª Ángeles y José y Mª Carmen. Habían traído a sus hijos a trabajar. Mª Ángeles nos contaba con la sencillez de quien reconoce la obra de Otro en su vida, que no imaginaba un sitio mejor que para pasar sus vacaciones. Para ella era un placer poder construir esa compañía humana que la Escuela de comunidad llama “el portico de Salomón” y que sus hijos pudieran ver el lugar al que sus padres pertenecían. Su marido Eduardo añadía que para él estos días suponían una educación para la vida, una educación en la gratuidad y en la obediencia.
Un día nos visitó un bodeguero de Navarra que un amigo había invitado a Rímini. Venía a conocer a bodegueros e importadores italianos de la CdO. Estuvo un día entero en el Meeting, comió con nosotros en el Restaurante y asistió a un encuentro con Carras. Nos ha enviado un mail agradeciendo la hospitalidad en el que confiesa su sorpresa por ver a tanta gente trabajando gratuitamente y con esa alegría.

 
 

Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

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