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Huellas N.8, Septiembre 2005

SOCIEDAD Meeting 2005

Economía. Lo que es útil para la persona

Paolo Biondi

Finanzas, capital, banca y competitividad. De eso y más hablaron algunos economistas

«¿Por qué esta escuela es diferente? Es diferente porque aquí nos quieren»: el pullazo de un chico de una de tantas cooperativas de formación profesional de la Compañía de las Obras llega como una flecha al corazón del público, que ya se disponía a interrogar y aplaudir al ministro italiano de Economía, Domenico Siniscalco y al consejero delegado de Banca Intesa, Corrado Pássera. Quién sabe lo que pasó por la mente y el corazón de los dos invitados a la mesa redonda en la jornada de clausura del Meeting de Rímini… Todavía no se habían recuperado del golpe cuando llega otro, de los labios limpios y sonrientes de una chica con velo, un velo blanco y gris azulado, no muy diferente de los que se debían usar en tiempos de María, hace dos mil años: «Nos dan más libertad», dice la chica de la cooperativa Cometa.

Experiencias vivas
Fue la síntesis más certera de una semana de debates sobre economía en el XXVI Meeting, el de la libertad. Se había discutido de finanzas, capital, formación, investigación, competitividad… de todo lo que se mueve bajo el cielo de la política económica. Pero coloquios partiendo de experiencias vivas con los que las llevan a cabo, sobre cómo trabajan y qué es lo que buscan. Demandas que resume el responsable de la “Comunidad Imprevisto”, de Pesaro, en esa mesa redonda final y que se dirigen a Siniscalco y a Pássera, y más tarde a Alessandro Profumo (consejero delegado de Unicrédito), sentado entre el público: «Al gobierno: entidad sin ánimo de lucro, impuestos cero; a los bancos: actividades sin ánimo de lucro, intereses cero» Demandas quizá algo duras, pero que nacen de exigencias verdaderas.
Los protagonistas del Meeting han buscado respuesta a estas exigencias sumando experiencia a la experiencia y respondiendo también a otra demanda fundamental, lanzada al comienzo de estas jornadas por el presidente de la Compañía de las Obras, Raffaello Vignali: «La exigencia de mayor libertad para la sociedad, para la persona, para la economía: una política al servicio de la creatividad social».

Capital e inversiones
Siniscalco anunció que el sector financiero contará con un corpus legal para el tercer sector, que contemple cuestiones fiscales y de contratación laboral; Pássera y Profumo se refirieron al papel de las fundaciones, aunque sigue pendiente la cuestión de las garantías para los préstamos a medio y largo plazo, se remitieron en concreto a los controles que se llevan a cabo desde el Convenio de Basilea II, con la nueva normativa que se impone a la banca a propósito de las garantías exigidas sobre los riesgos. Sobre este particular, Giorgio Vittadini recordó la desproporción en el trato que la mayoría de los bancos dispensan a unas u otras empresas, y pidió que «el sistema bancario financie la economía real, en lugar de sostener a los que ya no tienen mercado o invertir siguiendo criterios exclusivamente financieros». Porque de hecho hay capital para invertir y Fausto Marchionni, Director General del grupo inversor Fondiaria-SAI, recordó cómo sólo en 2004 las aseguradoras italianas invirtieron 416.000 millones de euros en el mercado financiero. ¿Pero adónde van esos capitales?, ¿Son para los que producen o para los parásitos rentistas? Vignali pidió que «se rebaje la presión fiscal para familias y empresas, penalizando a quien vive de rentas y privilegios» un tema que también saldrá a la palestra del debate político en otoño. Vittadini añadió que «no hay que seguir financiando empresas que están en quiebra». ¿Cómo se hace esto? Stefano Parisi, de Fastweb, pidió al gobierno «una actuación de choque sobre las inversiones y las infraestructuras». Para Giuseppe Guzzetti, presidente de ACRI y de la Fundación Cariplo, el desafío radica en la calidad del capital humano y de la formación, este es el punto en el que se tiene ganado el terreno de la competitividad»; según Elio Catania, de la red ferroviaria estatal, «la competitividad se pone en juego en la intersección de dos planos: el de las tecnologías y el de la movilidad laboral».

Alguna sorpresa
Diferentes caminos que convergen en un punto: valorar al que trabaja. Pero este Meeting no se echa atrás a la hora de dar la palabra a voces diferentes que incluso han deparado ciertas sorpresas. A propósito de la competitividad, el vicepresidente Giulio Tremonti reiteró los “riesgos fatales” para Europa (título también de su próximo libro): el euro y China, de la que según él sostiene, hay que estar prevenidos y protegerse. Esta música suena bien distinta en boca de Roberto Colaninno (de Piaggio), que ha ido a ganar el reto de la competitividad precisamente a la patria de las dos ruedas: «hay que estar en China porque la demanda cada año se multiplica al ritmo de dos cifras». La sorpresa llegó de la mano de Vittadini, quien defendió la capacidad emprendedora e innovadora, la presencia en el Tercer Mundo y las inversiones en investigación de Finmecanica (presente en Rímini primero con Pierfrancesco Guarguaglini y más tarde con Giorgio Zappa), industria que se dedica también al armamento y que tan poco agrada al asociacionismo católico. Todo ello demuestra que los debates en Rímini no eran ideológicos: partían de experiencias concretas. En resumen, se trataba de declinar la palabra libertad con la concreción que Roberto Mussari (de la Fundación MPS) llamó «responsabilidad» y que Savino Pezzotta, directivo del sindicado CISL, definió como «compromiso social», el campo en el que por naturaleza actúa el cristiano, pero también el hombre como tal.

Volver al punto de partida
Los ojos de los chavales a los que nos referíamos al principio no formaban parte de un golpe de efecto teatral planeado por los organizadores, aunque haya surtido este éxito. Eran la digna conclusión del modo en que se iniciaron los debates de economía en el Meeting 2005: con Roberto Mazzotta (presidente del Banco Popular de Milán) citando las palabras más silenciadas (por los medios de comunicación) de Benedicto XVI en la Jornada de la Juventud de Colonia: lo útil no es lo que recibo, sino lo que doy. Esta es la verdadera revolución económica de la que se ha hablado este año en Rímini. Porque, como dijo el ya citado presidente de la “Comunidad Imprevisto”, «quien realmente no cobra impuestos al sector público y a las instituciones es el tercer sector», ya es hora de que se le reconozca y reciba lo que merece.

 
 

Créditos / © Asociación Cultural Huellas, c/ Luis de Salazar, 9, local 4. 28002 Madrid. Tel.: 915231404 / © Fraternità di Comunione e Liberazione para los textos de Luigi Giussani y Julián Carrón

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